En lo principal del pueblo, a orillas del Guadalquivir, se emplaza la antigua parroquia de San Pedro (foto izq), utilizada con tal fin hasta que en 1907 se hizo la nueva parroquia de la Inmaculada. Para dicho templo aprovechó el viejo recinto del castillo, incrustándose en él una construcción de nave única con techumbre de madera, aunque todo ello aparece transformado y convertido en la actualidad en Ayuntamiento. La reconversión del castillo en parroquia se verificó entre 1531 y 1537 bajo la dirección de Hernán Ruiz I, cuya mano se percibe en la portada que asoma a la Plaza de la Constitución. Pese a esa cronología, tal portada a acusa un esquema gótico con ingreso adintelado entre columnas con decoración de cardina y remate de medio punto muy moldurado, produciéndose los característicos cruces de baquetones que se ve en otras obras del citado artistas, lo mismo que los conopios que cobija este medio decoronamiento. En su clave figura una bella laurea renacentistas con escudo taqueado que se corresponde con las armas del obispo Fray Juan Álvarez de Toledo, bajo cuyo episcopado se hizo en esta portada. Sobre ella monta una ventana avenerada, testimonio claro de las obras que se realizaron en el edificio en 1743.
A poca distancia se levanta la parroquia de la Inmaculada Concepción (foto der.), que según se dijo data de 1907, erigiéndose entonces por la necesidad de una iglesia de mayores dimensiones. Es un templo de buena y cuidada construcción en piedra molinaza y ladrillo, típica del eclecticismo arquitectónico de comienzos de siglo. Su interior tiene tres amplias naves abovedadas con arcos de medio punto sobre pilares realzados con columnas adosadas. Asoma a la calle con robustos muros coronados en modillones de rollos, imitando lo musulmán. Su noble fachada de molinaza, llena de evocaciones medievales, presenta experta composición centrada por torre, con la portada principal en su parte baja, ajustándose todo ello a un modelo propio de la época y que en sus rasgos fundamentales se repite en la parroquia de Santa Bárbara de Pueblonuevo.
Dentro del núcleo urbano se localizada además la ermita de San Roque o Jesús Nazareno, hoy utilizada como iglesia del colegio de la Divina Pastora, fundado en 1917. Es un templo sencillo de nave única abovedada y cabecera cuadrada con cúpula. Su plan denota un origen antiguo, aunque el edificio fue reedificado y ampliado en el siglo XIX, concretamente en 1840, como indica una lápida exterior.
Fuera de la poblacion, en un alto vecino, queda la ermita de la Virgen de la Estrella, patrona de la villa. Su bello edificio barroco, construido a partir de 1738 con limonas del vecindario y reparado a mitad del siglo pasado, se ajusta al tradicional plan de nave abovedada y cabecera con cúpula. Esta, al igual que el camarín, se enriquece con serpenteantes moldurajes barrocos, muy tipicos de esta zona ribereña del Guadalquivir. Tiene, ademas, pintores con exteriores con portada dieciochesca de decoración geométrica y, sobre ella, espadaña de ladrillo de dos cuerpos, formada en 1899.
JRC
(En la actualidad el retablo de la patrona, en la Ermita de la Estrella, está siendo sustituido por uno nuevo inspirado en el primero que tuvo.)
A poca distancia se levanta la parroquia de la Inmaculada Concepción (foto der.), que según se dijo data de 1907, erigiéndose entonces por la necesidad de una iglesia de mayores dimensiones. Es un templo de buena y cuidada construcción en piedra molinaza y ladrillo, típica del eclecticismo arquitectónico de comienzos de siglo. Su interior tiene tres amplias naves abovedadas con arcos de medio punto sobre pilares realzados con columnas adosadas. Asoma a la calle con robustos muros coronados en modillones de rollos, imitando lo musulmán. Su noble fachada de molinaza, llena de evocaciones medievales, presenta experta composición centrada por torre, con la portada principal en su parte baja, ajustándose todo ello a un modelo propio de la época y que en sus rasgos fundamentales se repite en la parroquia de Santa Bárbara de Pueblonuevo.
Dentro del núcleo urbano se localizada además la ermita de San Roque o Jesús Nazareno, hoy utilizada como iglesia del colegio de la Divina Pastora, fundado en 1917. Es un templo sencillo de nave única abovedada y cabecera cuadrada con cúpula. Su plan denota un origen antiguo, aunque el edificio fue reedificado y ampliado en el siglo XIX, concretamente en 1840, como indica una lápida exterior.
Fuera de la poblacion, en un alto vecino, queda la ermita de la Virgen de la Estrella, patrona de la villa. Su bello edificio barroco, construido a partir de 1738 con limonas del vecindario y reparado a mitad del siglo pasado, se ajusta al tradicional plan de nave abovedada y cabecera con cúpula. Esta, al igual que el camarín, se enriquece con serpenteantes moldurajes barrocos, muy tipicos de esta zona ribereña del Guadalquivir. Tiene, ademas, pintores con exteriores con portada dieciochesca de decoración geométrica y, sobre ella, espadaña de ladrillo de dos cuerpos, formada en 1899.
JRC
(En la actualidad el retablo de la patrona, en la Ermita de la Estrella, está siendo sustituido por uno nuevo inspirado en el primero que tuvo.)
