Hacer Historia

(Paco Laguna)
Fuente: Revista de Feria de 1998

Hace unas fechas, en uno de mis adictos viajes al Rastro de Madrid, encontré un documento que me hizo mucha ilusión, y por supuesto compré para tenerlo en mi modesta biblioteca. Se trata de la primera revista de feria de nuestro Villa del Río, en la que podemos leer en su portada:

FIESTAS EN VILLA DEL RIO,
QUE EN HONOR DE SU EXCELSA PATRONA
MARIA SANTÍSIMA DE LA ESTRELLA,
TENDRA LUGAR DURANTE LOS DÍAS 7,8,9,10 Y 11
DEL MES DE SEPTIEMBRE DEL CORRIENTE
AÑO DE 1927.

Un histórico ejemplar que nos dice que la revista que tiene en sus manos, distinguido lector, tiene una antigüedad de edición de 71 años, que por aquellas fechas era un gran mérito editar una revista con el contenido tan suculento como lleva dentro y de tanta historia para Villa del Río.

Se dice: "Villa con 6.373 habitantes, cabeza de Ayuntamiento del partido judicial de Montoro, situada a 168 metros sobre el nivel del mar, a la margen izquierda del Guadalquivir, a 1 Km y 400 m del límite oriental de la provincia, al pie de tres colinas llamadas San Cristóbal, los Relaños y Morrón y al Essudoeste de la cabeza de partido.
El término municipal es terreno de buena calidad por la campiña que se extiende al sur y arenisco por la parte del Norte. Sus principales productos son: aceite, cereales y hortalizas, cría de ganado de cerda, caballar y vacuno, caza menor y pesca de anguilas, albures, peces y barbos.
Tiene estación férrea en la línea de Madrid a Cádiz distante de la población 500 metros por camino bueno".
"La Ermita de Nuestra Señora de la Estrella patrona del pueblo y a quien los vecinos tienen gran devoción, está situada a 300 metros de la población".

Se inserta un articulo firmado por las iniciales J.P.L. que dice así y es digno de mención:
"Así se Hace. Villa del Río quiere ser digno de su tiempo y de su privilegiada situación; al margen de un gran río, al borde de una vía férrea de primer orden, ve claro el esplendor de su destino. No le basta la feracidad de sus campos, el florecimiento de sus industrias; aspira al supremo bien; la cultura de sus hijos. Y para lograrlo emprende el camino cierto que lleva al estado de plena civilización; construye más escuelas y aumenta sus plazas de maestros primarios. Esta discreta y gallarda actitud es ejemplo digno de alabanza y de imitación. Es una hermosa lección que deben tomar muchos pueblos con reputación de ilustrados y fama de ricos, con humos de grandes señores que atienden de cualquier manera a la educación y enseñanza de la niñez; algunos de esos que están dando asunto a esas aflictivas crónicas de Bello.
Villa del Río es un alarde optimista del renacer de España. Desde que se pisan sus calles -tan elocuentes son las cosas de allí- gana al ánimo la confianza de días mejores para la patria. Su juventud, su actitud, su alegría son pregoneras del empuje de sus naturales para elevar el pueblo a la categoría de ciudad de un gran país. Y ello, de hoy más, lo confirman elocuentemente los magníficos edificios para graduadas que está levantando. Como que dentro de poco podrá mostrar orgulloso las más completa de la provincia.
De tal suerte se comporta aquella Aldea de ayer. Y así se asegura la importancia y decoro de ciudad modelo de mañana."

La información gráfica es abundante, podemos ver la corporación municipal con su alcalde D. Juan Torralba Montes, del que se dice: "Joven alcalde que con su actividad y celo ha conseguido en el tiempo de su actuación transformar el pueblo dotándolo de Casa de Socorro con varias dependencias, un matadero con los mayores adelantos, camioneta de riegos, carros de conducción de carnes, limpieza y de transporte, etc., etc y otras muchas reformas y servicios, a más de las obras de alcantarillado y pavimentación hechas y que se están llevando a efecto en la actualidad".

Se dice también al pie de una foto de don Emilio de León y Primo de Rivera, que siendo alcalde, donó unos terrenos donde se están levantando dos grandes grupos escolares.

Algunas fotos dicen en su pie:
- Fachada del Ayuntamiento y del Mercado Público;
- Estación del Ferrocarril a 300 metros de la población;
- Puente romano sobre el río Salado;
- Arco de entrada al Real de la Feria;
- Vista general de la población desde el puente de hierro,
- Elevación de globos,
- Paseando por el Real de la Feria,
- Calle Sotomayor de reciente urbanización,
- Aspecto de la feria de ganado,
- Calle de los Molinos y de Eduardo Lope, está recientemente pavimentada y alcantarillada,
- Grupos escolares de cinco aulas cada uno en construcción destinados a niños y niñas,
- Casa de Socorro con los médicos Drs. Buisan y Coleto,
- Convento de Jesús destinado a colegio de niños y niñas, y calle Santos Isasa,
- Puente de hierro sobre el Guadalquivir,
- Hospital en construcción,
- Nuestra Patrona de la Estrella patrona de Villa del Río,
- Central de teléfonos,
- Vista de las Aceñas, terrenos cedidos por el Conde de Monte Real para campo de Aviación Militar,
- Carros de Limpieza,
- Dos vistas del Matadero público,
- La banda de municipal recientemente instrumentada y uniformada.

Algunos anuncios dicen:
- Sociedad de aguas potables La Estrella;
- Mangranel y Cia., fábrica de extracción de aceites y cereales;
- Viuda de Eduardo Vinuesa Núñez, fábrica de jabones;
- Dionisio Carabaño, almacén de pieles;
- Pescadería Pastilla;
- Miguel Colomer Martí, Fábrica de sulfuros, jabones, extracción de aceites de orujo químico de D. Miguel Lope Ruperez;
- Automóviles Andrés Coba Llorente;
- Juan Torralba, paquetería, ferretería, ultramarinos;
- Francisco Muñoz Martín, exportador de aceites y cereales;
- Domingo Buitrago Rodríguez, Exportador de aceites y cereales;
- Viuda de Bartolomé Borrego Castro, fábrica de chocolates;
- José Pérez Calleja, fábrica de harinas y sémolas;
- Cesáreo García, establecimiento de comestibles....

Son detalles de un pasado que nos sirve de mucho para mirar al presente, ya que las historia de los pueblos es fundamental.
Hace unas fechas hablaba con un amigo de la buena labor de la radio de nuestro pueblo "Matías Prats F.M." al crear afición hacia la misma, por sus puertas abiertas, a mí me las abrieron cuando se inauguró y nunca había pisado una radio y hoy me encanta, posiblemente no sepamos valorar el trabajo de Javier Calleja, pero algún día, como hoy hacemos con esta revista tan añeja, hagan otras generaciones al hacer historia de nuestro pueblo.